Principios y compromisos

Nuestro trabajo está guiado por la ética médica, por los principios de la acción humanitaria y por el compromiso con valores que ponemos en práctica todos los días en las acciones y decisiones que tomamos. Respetarlos y defenderlos nos permite prestar ayuda urgente a quien más lo necesita.

Ética Médica

Nuestra obligación como profesionales de la medicina es asistir sin causar daño.

Principios de la acción humanitaria

  • Humanidad: todas las personas tienen derecho a ser asistidas en su hora de mayor necesidad.
  • Independencia: ningún poder político, económico o religioso dicta nuestras acciones.
  • Imparcialidad: no preguntamos por la raza, la religión o la ideología de pacientes.
  • Neutralidad: no tomamos partido por nadie, solo por las personas que necesitan ayuda.

 

Valores

  • Proporcionalidad: nuestra asistencia responde equilibradamente a las necesidades que detectamos.
  • Profesionalidad: estamos comprometidos con la calidad y la eficacia de la ayuda.
  • Proximidad: proporcionamos asistencia directa, sin intermediarios.
  • Compromiso individual: asumimos una responsabilidad personal con nuestro trabajo y aceptamos los riesgos que entraña.
  • Sin ánimo de lucro: no generamos beneficios para nosotros mismos: destinamos los fondos recibidos a acción médica, testimonio, administración y captación de recursos.
  • Control de la ayuda: nuestro trabajo y nuestras finanzas están sometidos a estrictas supervisiones internas y externas.
  • Transparencia: nuestras cuentas e informes financieros son públicos.

Quienes integramos Médicos Sin Fronteras (MSF) respetamos estos compromisos de conducta para poder desempeñar nuestra labor dentro de la organización, ya sea en el terreno como en las oficinas:

1. El personal de MSF y los socios operacionales deberán comportarse respetuosamente y no discriminarán a pacientes, colegas o miembros de la población local en función de su raza, opiniones, estilo de vida, género, orientación sexual, contexto socioeconómico, origen, religión o creencias y otros marcadores de identidad;

2. El personal de MSF y los socios operacionales no abusarán de nadie físicamente (es decir, violencia física, agresión sexual u otras formas de abuso físico) o psicológicamente (por ejemplo, intimidación, abuso de poder, acoso, discriminación o favoritismo);

3. El personal de MSF y los socios operacionales no aceptarán, en ninguna circunstancia, un comportamiento que explote la vulnerabilidad de otras personas, en el sentido más amplio posible (sexual, económico, social, etc.). Esto incluye el intercambio de bienes, beneficios o servicios por actos de naturaleza sexual, incluido el uso de servicios de trabajadores sexuales durante la misión asignada;

4. El personal de MSF y los socios operacionales no aceptarán el abuso, la explotación y la violencia infantil ni mantendrán relaciones sexuales con menores¹;

5. El personal de MSF y sus socios operacionales no se aprovecharán de su posición para obtener un beneficio personal. Todos los miembros del personal de MSF utilizarán los recursos de MSF (incluidas las instalaciones, los bienes, el dinero, la reputación, la imagen, etc.) con respeto y cuidado, y en interés de la organización y la población a la que se intenta ayudar.

¹Artículo 1 de la Convención sobre los Derechos del Niño de las Naciones Unidas, adoptada y abierta a la firma y ratificación por la Asamblea General en su resolución 44/25, de 20 de noviembre de 1989, entrada en vigor el 2 de septiembre de 1990, de conformidad con el artículo 1: “Para los efectos de la presente Convención, se entiende por niño todo ser humano menor de dieciocho años de edad, salvo que, en virtud de la ley que le sea aplicable, haya alcanzado antes la mayoría de edad”.

Médicos Sin Fronteras es una asociación privada con vocación internacional. La asociación reúne mayoritariamente a médicos y miembros de los cuerpos sanitarios y está abierta a otros profesionales útiles a su misión. Todos se comprometen a honrar los siguientes principios:

Los Médicos Sin Fronteras socorren a las poblaciones desamparadas, a las víctimas de catástrofes de origen natural o humano, de situaciones de conflicto, sin ninguna discriminación por raza, religión, filosofía o política.

Al actuar con neutralidad e imparcialidad, los Médicos Sin Fronteras reivindican, en nombre de la ética médica universal y del derecho a la asistencia humanitaria, la plena y entera libertad del ejercicio de su función.

Se comprometen a respetar los principios deontológicos de su profesión y a mantener una total independencia de todo poder, así como de toda fuerza política, económica o religiosa.

En su condición de voluntarios, miden los riesgos y peligros de las misiones que cumplen y no reclamarán para sí mismos ni para sus allegados compensación alguna, salvo la que la asociación sea capaz de proporcionarles.

Suscríbete al Newsletter
Tus Datos
*Campo obligatorio
*Campo obligatorio
*Seleccione al menos una opción
Esta web usa cookies propias y de terceros para ofrecerte una mejor experiencia. Al navegarla aceptas su uso.