El brote de cólera en Yemen puede volverse incontrolable ya que los casos de esta enfermedad y los de diarrea acuosa aguda están aumentando en todo el país. Así lo advierten nuestros equipos en Yemen, que han visto cómo el número de posibles casos ha ascendido a más del doble en los últimos cinco días.
En concreto, de los 11.000 registrados el pasado 14 de mayo se ha pasado a más de 23.500 contabilizados el día 19, según las últimas cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Así, la enfermedad se ha extendido en 18 de las 22 gobernaciones de Yemen, según el ministerio de Salud Pública y Población yemení.
Nuestros equipos han tratado a más de 5.000 pacientes en cuatro centros y nueve unidades de tratamiento de cólera en las gobernaciones de Amran, Hudaydah, Hajjah, Ad Dali, Taiz e Ibb. Además, están a la espera de recibir más de 63 toneladas de suministros que llegarán a Yemen en los próximos días.
El origen del brote
“La rápida propagación del brote de cólera es extremadamente alarmante”, afirma Ghasan abu Char, nuestro coordinador general en Yemen. “Antes del brote, el sistema de salud estaba al límite y las necesidades de la población eran ya enormes. Para lograr tener el brote bajo control no bastará simplemente con tratar a aquellos que acuden a los centros médicos, también necesitamos dirigirnos a la fuente de la enfermedad mejorando las actividades de agua y saneamiento y trabajando con las comunidades para evitar nuevos casos”.
La guerra en Yemen, que sufrió una escalada en marzo de 2015, ha impactado gravemente en el ya maltrecho sistema de salud del país. Muchas instalaciones médicas no funcionan y hay escasez de medicamentos, incluyendo fluidos intravenosos y sales de rehidratación oral, esenciales para el tratamiento del cólera. Los esfuerzos para tratar a los pacientes se ven dificultados por esta escasez.
El personal médico en Yemen no recibe su salario desde septiembre de 2016 y muchos se han visto obligados a buscar otro trabajo para que sus familias salgan adelante. Mientras tanto, la inseguridad impide a las organizaciones de ayuda humanitaria trabajar en algunas de las áreas afectadas por el conflicto.
Hacemos un llamamiento para que se implemente una respuesta urgente y apropiada para controlar el brote de cólera, y para que se faciliten las importaciones de suministros médicos a Yemen. También solicitamos que el personal médico reciba incentivos de modo que puedan llevar a cabo su trabajo.
Llamamos a las partes del conflicto para que se garantice que el personal médico y los trabajadores humanitarios puedan llegar a las áreas afectadas por el conflicto y se posibilite así que gestionen las instalaciones médicas, tratar a los pacientes y controlar el brote de cólera.
Trabajamos en 13 hospitales de Yemen y brinda apoyo a más de 25 centros en 11 gobernaciones del país.