Esta colaboración ha incluido diversas mejoras en la infraestructura hospitalaria, la formación del personal y el diseño de rutas de atención que mantengan la bioseguridad tanto de los pacientes, familiares y el personal del hospital. Están habilitadas zonas de tamizaje, triaje y una de hospitalización con 35 camas que cumplen con todos los estándares sanitarios necesarios.
Un equipo de 79 personas de MSF y 276 del hospital Lídice, entre médicos, enfermeras, camilleros, radiólogos, especialistas en biomedicina, especialistas en logística, psicólogos, trabajadores sociales, técnicos y personal de mantenimiento y seguridad, trabajan en conjunto para brindar atención integral a las personas que acuden al hospital con síntomas de COVID-19. La salud mental ha sido parte fundamental dentro de las operaciones que MSF lleva adelante en sus proyectos relacionados al COVID-19, en un servicio que se ofrece tanto a pacientes y sus familiares como a los propios equipos humanos del centro.
Hasta del 23 de enero de 2022 (últimas cifras analizadas), se han realizado en el circuito de COVID-19 del hospital 10.625 consultas de triaje respiratorio, se han hospitalizado a 454 personas y sensibilizado a 14.709 a través de promoción a la salud. Asímismo, se han realizado 1.587 consultas de salud mental y 399 referencias para traslados de pacientes.
Las actividades en el hospital Jesús Yerena de Lídice se están realizando con total normalidad, respondiendo a las necesidades de las personas que asisten. El hospital cuenta con dos plantas eléctricas, un sistema de tanques de almacenamiento de agua y un sistema de oxígeno para garantizar el suministro a los pacientes hospitalizados.