El gobierno de Colombia emitió la primera licencia obligatoria (LC) de su historia con el fin de mejorar el acceso a versiones genéricas menos costosas de un medicamento clave contra el VIH: el dolutegravir.
Esto lo hizo sin permiso del titular de la patente, ViiV Healthcare (una empresa conjunta de GlaxoSmithKline, Pfizer y Shionogi).
Nuestra organización, junto con Public Citizen y Global Humanitarian Progress Corporation Colombia, acogieron con satisfacción esta medida histórica, la cual constituye un ejemplo alentador para los países de la región y fuera de ella. Y da luces sobre cómo funciona en la práctica una LC para mejorar el acceso a los medicamentos.
Medicación contra el VIH: barreras de patentes y altos costos
El dolutegravir se recomienda como parte del régimen de tratamiento de primera línea preferido para las personas con VIH, incluso durante el embarazo, según las directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Utilizamos una pauta de tratamiento de primera línea basada en dolutegravir en todos nuestros programas de VIH/sida y hemos observado que los pacientes se benefician de los menores efectos secundarios del fármaco y del menor riesgo de desarrollar resistencias.
Sin embargo, en muchos países en los que trabajamos , el acceso a versiones genéricas más asequibles de dolutegravir sigue siendo un reto.
En Colombia, debido a las barreras de las patentes y a los altos precios, aún no hemos podido introducir el dolutegravir en sus programas médicos.
Aunque las versiones genéricas de dolutegravir están disponibles internacionalmente por una fracción del precio de ViiV a través de licencias voluntarias con el Medicines Patent Pool (MPP), ViiV excluyó a Colombia y a muchos países de renta media de poder beneficiarse de su licencia con el MPP, permitiendo a ViiV mantener su monopolio y seguir cobrando altos precios en Colombia y otros países excluidos de la licencia.
Según el gobierno colombiano, el coste estimado del tratamiento con dolutegravir, comercializado por el Laboratorio ViiV bajo la marca Tivicay, era de 1.224 dólares por paciente al año en 2023.
Se trata de un sobreprecio exorbitante si se compara con el precio de 22,80 dólares o 44 dólares por paciente/año del dolutegravir genérico ofrecido en 2023 a través del Fondo Mundial y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), respectivamente, y que Colombia, sin embargo, no pudo adquirir.
El precio disponible para el Ministerio de Salud en virtud de la LC de hoy (44 dólares por paciente/año) es, por tanto, un gran paso para permitir el acceso a versiones genéricas más asequibles de dolutegravir para todas las personas que lo necesiten, incluso abriendo la puerta para que podamos introducir el dolutegravir en nuestros programas médicos.
«La decisión de Colombia de emitir una licencia obligatoria para dolutegravir es una gran noticia porque, hasta ahora, no hemos podido introducir dolutegravir en nuestras operaciones médicas ya que los costes han sido prohibitivos.
Por lo tanto, acogemos con gran satisfacción la decisión de hoy y la noticia del precio genérico más asequible, ya que esto facilitará el uso de dolutegravir en nuestro tratamiento de primera línea del VIH para los supervivientes de la violencia sexual a los que atendemos en nuestras operaciones médicas en Colombia, y permitirá que cada vez más personas que viven con el VIH en el país tengan acceso al medicamento más eficaz.»
Dra. Carmenza Gálvez, coordinadora médica de MSF en Colombia y Panamá
«El licenciamiento de dolutegravir en Colombia permitirá prevenir la transmisión del VIH, llegar a los migrantes que necesitan tratamiento, apoyar la sostenibilidad financiera del sistema de salud colombiano y promover la equidad y los derechos humanos de las personas que viven con VIH.
A nivel regional, la implementación de este mecanismo genera un precedente vital para promover el acceso a medicamentos esenciales. Es necesario avanzar hacia la eliminación del VIH como problema de salud pública a nivel mundial y contribuir al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Los gobiernos latinoamericanos tienen derecho a utilizar las flexibilidades del ADPIC para proteger la salud de sus ciudadanos.»
Luz Marina Umbasia Bernal, directora de la Corporación Global Progreso Humanitario Colombia
«Colombia está plantando una bandera por la equidad sanitaria global. Esto inspirará nuevos desafíos regionales a las barreras de las patentes y mejorará el acceso a los tratamientos, hacia una generación libre de sida.
Los activistas por el tratamiento han trabajado durante años para lograr esta decisión, ayudando a Colombia a plantar cara a las farmacéuticas. Cuando las soluciones mundiales se quedan cortas, los países pueden y deben tomar el control para garantizar el acceso a los medicamentos para todos.»
Peter Maybarduk, director de acceso a medicamentos de Public Citizen