Drone. La palabra provoca escalofríos en los corazones de muchos actores humanitarios. Pero estos Vehículos Aéreos No Tripulados (VANT) están siendo utilizados con cada vez más frecuencia para anticipar y ampliar los esfuerzos de emergencia para salvar vidas.
Los mapas informativos mejorados gracias a los Sistemas de Información Geográfica (SIG) han cambiado las reglas del juego para Médicos Sin Fronteras (MSF), ya sea que busquemos realizar el esquema de un gran campo, identificar la ubicación de puntos para perforar durante un brote de cólera o dar seguimiento a una campaña de vacunación que está realizándose.
En el distrito de Nsjanje, al sur de Malawi, un equipo de MSF utilizó recientemente un pequeño dron para realizar un mapeo aéreo de Makhanga, un área de 60km cuadrados que fue parcialmente bloqueada de la ayuda durante una gran inundación en 2015. Existían pocos mapas del área, y los equipos de emergencia querían estar preparados ante la temporada de lluvias.
Para comenzar, un drone pre programado de 700 gramos fue lanzado desde varias pistas de aterrizaje improvisadas, incluyendo un campo local de fútbol. El drone fue dirigido para volar por debajo de las nubes y tomar varias fotografías para así crear un mosaico único. Estas fotografías fueron organizadas y unidas para crear una ortofotografía, en la que la imagen es corregida geométricamente para darle una escala uniforme. Después, se integraron con un software de georeferencia para crear un mapa integral que pueda ser utilizado durante futuras intervenciones.
“Aunque GoogleMaps cada vez gana más fuerza, seguimos trabajando en áreas muy remotas o con una gran carga política que frecuentemente no están mapeadas. El pedir imágenes de satélite durante una emergencia frecuentemente es un proceso muy tardado, muy costoso u ofrece información bastante rígida,”dice Amaury Gregoire, jefe de misión de MSF en Malawi.
“Los drones ofrecen una solución altamente complementaria que permite crear mapas informativos rápidamente y que permiten a los equipos comprender la magnitud de la situación, los lugares en donde está la población y comunicarse a distancia con los tomadores de decisiones y con los actores en el terreno.”
Entender las leyes de espacio aéreo es algo vital para lanzar drones en diversas áreas. A pesar de que es una nueva tecnología, las leyes se siguen desarrollando. En Nsjanje, el equipo de MSF buscó una autorización oficial por parte del comisionado del distrito para poder volar el drone por todo el distrito, y también se alertó a las autoridades aéreas más cercana sobre el lanzamiento. De forma local, se reunieron con los jefes del pueblo y con la policía para poder encontrar lugares idóneos para realizar los lanzamientos.
Raphael Brechard, el Coordinador de SIG y quien gestionó el mapeo de Makhanga, es uno de los dos integrantes del personal SIG de MSF que trabaja en Malawi y Mozambique. “Hemos tenido una experiencia muy positiva con el uso de drones para crear soluciones innovadoras para problemas complejos, y estamos entusiasmados ante las perspectivas a futuro,” declara.
“Las fotografías tomadas con drones también podrían ayudar en la creación deo video en 3D para explorar la evolución de una emergencia como un terremoto o una inundación. Incluso podemos ver el uso de estas imágenes para crear aplicaciones de realidad virtual que permitan el apoyo remoto a personas durante emergencias en las que el acceso humano es imposible. Las posibilidades son infinitas.”
Para promover el uso generalizado de los drones tanto dentro de Médicos Sin Fronteras como en otras organizaciones humanitarias, el equipo de MSF invitó al camarógrafo Morgana Wingard a filmar el evento. Las imágenes de los intentos fallidos también serán usadas durante futuros entrenamientos de operadores de drones de MSF.