Los asentamientos se encuentran al sur del mayor campo de refugiados de Rohingya, el mega campo de Kutupalong-Balukhali, cerca del extremo sur de la península de Cox’s Bazar: una estrecha franja de tierra a lo largo del río Naf que divide a Bangladesh y Myanmar.
Atención en salud primaria
Gestionamos un centro de salud primaria en Nayapara y otro en Unchiprang. Estas clínicas se centran en la atención en salud primaria y en servicios estándar para pacientes ambulatorios. Los pacientes pueden acceder a un médico o traer a los niños para que sean vacunados, además se proporcionan vendajes para heridas. También hay servicios para las mujeres embarazadas o que han dado a luz recientemente. Todos los días, la clínica en Unchiprang brinda alrededor de 200 consultas y la de Nayapara alrededor de 250. Los pacientes provienen tanto de las comunidades anfitrionas como de los campos de refugiados.
Además de la atención médica primaria, estas clínicas proporcionan servicios de salud mental, médicos y psicosociales para sobrevivientes de violencia sexual. También brindan atención de emergencia las 24 horas, estabilización y derivaciones por medio de ambulancias.
Servicios de emergencia las 24 horas
En el campo de Unchiprang, nuestro centro de salud es la única instalación médica que brinda servicios las 24 horas. “Aquí en mi campo”, comenta la supervisora de enfermería, Tanjima Chowdhury, “solo MSF tiene turnos de 24 horas, al igual que servicios regulares de atención médica primaria. No hay otro tipo de apoyo médico disponible las 24 horas. Ninguno.»
Chowdhury explica que los pacientes acuden al centro de salud por la noche, con problemas de emergencia o en un estado de salud muy grave:
“Llegan con dificultades respiratorias graves, con lesiones por accidentes y, si están en labor de parto, con sangrado severo.”
“Los refugiados rohingya en realidad no tienen otra opción«, continúa. «No se les permite salir del campo. Solo MSF puede referir a los pacientes a otro centro. Si MSF no ofreciera sus servicios las 24 horas, sería difícil para ellos «.
Catarina Branco, directora de las actividades de enfermería en el centro de salud de Nayapara, está de acuerdo: «Tenemos la sala de observación y la sala de urgencias, donde recibimos casos de la calle, la comunidad y los campos. Los pacientes acuden principalmente por la noche y en las primeras horas de la mañana, después de la primera oración del día. Tenemos muchos pacientes. A veces, cuando llegamos por la mañana, el lugar ya está lleno».
Referencias
Branco explica que los equipos deben identificar qué pacientes pueden tratarse en el centro de salud, donde pueden ser estabilizados y estar bajo observación hasta por 24 horas, y cuáles deben ser referidos a otra instalación: «Por ejemplo, si tenemos un caso quirúrgico, siempre haremos una referencia porque no tenemos capacidad quirúrgica en este lugar. Pero imagina un niño de cuatro años con dificultades respiratorias que necesita nebulización y debe ser monitoreado por un tiempo … simplemente lo mantenemos aquí con su madre o alguien de la familia, monitoreamos, esperamos hasta que el paciente mejore y luego lo enviamos a casa.»
A veces los pacientes luchan por entender cómo funcionan las referencias. Un equipo de promotores de salud voluntarios rohingyas se encarga de explicarlo a estas personas. «Los pacientes muchas veces no pueden entender por qué estos servicios no están disponibles aquí, por qué debe ir a otro lugar», dice Chowdhury, «A veces es confuso. Nos ayudan a explicar por qué se necesita la referencia «.
Actividades continuas
Más de un año después del inicio de la crisis actual, las clínicas de salud primaria en Unchiprang y Nayapara continúan adaptándose y expandiendo sus actividades. Se comenzó la construcción de una maternidad en Nayapara, y se planea tener una nueva clínica móvil. La clínica en Unchiprang también se ampliará para proporcionar más espacio para las áreas de espera y consulta, asesoramiento de salud mental y las actividades de promoción de la salud.
«Siempre intentamos mejorar nuestras instalaciones y aumentar nuestras actividades según la situación, de acuerdo con las necesidades del paciente», concluye Chowdhury.