Los 62 países copatrocinadores de la propuesta de exención de la propiedad intelectual sobre la tecnología médica COVID-19 han presentado una propuesta revisada a la Organización Mundial del Comercio (OMC). En ella se reafirma que el alcance de la exención debe abarcar todos los instrumentos médicos –tratamientos, diagnósticos y vacunas, así como dispositivos médicos, equipos de protección, materiales o componentes y métodos de fabricación necesarios para su producción– y se señala que la duración de la exención debe ser de al menos tres años. La propuesta también incluye que, pasado este periodo, debe ser revisada por el Consejo General de la OMC. Ahora que los gobiernos copatrocinadores han presentado una nueva propuesta revisada, desde Médicos Sin Fronteras (MSF) instamos a todos los gobiernos a pasar inmediatamente a las negociaciones en base a un documento concreto.
El consenso internacional es cada vez mayor en que esta propuesta de exención de los Aspectos de los Derechos de Propiedad Intelectual relacionados con el Comercio (ADPIC) debe negociarse y aprobarse de manera urgente. El COVID-19 sigue causando estragos en países de todo el mundo y se ha cobrado la vida de casi 3,5 millones de personas. 62 países son ahora copatrocinadores oficiales de la propuesta tras sumarse a la misma Indonesia, Fiyi, Vanuatu y Namibia en las últimas semanas. Más de 100 países apoyan la propuesta en estos momentos, incluidos China y Rusia.
El 5 de mayo, EE. UU. expresó su apoyo al inicio de las negociaciones sobre una exención. El jueves, el Parlamento de la UE aprobó una resolución sobre el VIH/SIDA que incluía un apoyo explícito a la propuesta de exención. Se espera que el parlamento de la UE vote a principios de junio una resolución específica de apoyo a la propuesta de exención de los derechos de propiedad intelectual. Sin embargo, hasta ahora la Comisión Europea ha paralizado las negociaciones sobre la propuesta.
Leena Menghaney, responsable de nuestra Campaña de Acceso en el sur de Asia, dice:
«Nos complace ver que los Gobiernos que patrocinan la propuesta de exención de la propiedad intelectual del COVID-19 reafirman que esta tiene como objetivo eliminar las barreras del monopolio para todas las herramientas médicas, incluidos medicamentos, pruebas de diagnóstico, vacunas y los equipos y materiales necesarios para hacer frente a esta pandemia, durante un período mínimo de tres años. Con un aumento aterrador de las infecciones y las muertes en los países en desarrollo, y con tratamientos potencialmente prometedores en preparación, es crucial que los países tengan toda la flexibilidad a su disposición para hacer frente a esta pandemia.
La propuesta revisada tiene por objeto garantizar que la exención de los ADPIC se adapte a las necesidades de esta pandemia. La propuesta de suspensión se presentó por primera vez hace casi ocho meses, por lo que no podemos permitirnos perder un tiempo que es precioso: el virus sigue cobrándose millones de vidas en todo el mundo y el despliegue de la vacuna es sumamente lento en los países en desarrollo.
Tras la expresión de apoyo de Estados Unidos a la exención el pasado 5 de mayo, ha habido un creciente consenso mundial de que hay que llegar a la suspensión y que esta tiene que decretarse con rapidez. Instamos a los últimos gobiernos que siguen arrastrando los pies, especialmente la UE, a que apoyen urgentemente esta propuesta y dejen de actuar como si mantener el statu quo y actuar como siempre fuera a sacarnos de esta pandemia«.